La Asociación de Aerolíneas Europeas (AEA) insta a la Comisión Europea y a los Gobiernos de los 35 países de la Unión Europea (UE) a que se implante el denominado ‘cielo único europeo’, como condición previa a la aplicación de la Directiva comunitaria de Comercio de Emisiones (ETS), prevista para el próximo 2012 y aplicable a todas las industrias europeas. Para la AEA, "el único marco adecuado para un sistema de emisiones de CO2 es un espacio global, ya que sólo así se podrá competir al mismo nivel", según declaraciones del actual presidente de AEA —y presidente de KLM—, Peter Hartman.
Hartman destaca que "no puede entenderse una economía sin una infraestructura aérea sostenible, para lo que se necesita un marco regulador adecuado dentro de la UE". En esta línea, el presidente de AEA apunta que "la industria aérea está trabajando de forma incansable con proveedores y fabricantes para desarrollar nuevos combustibles y nuevas tecnologías más verdes". Y añade que "estamos seguros de que la tecnología puede propiciar una aviación baja en emisiones y al mismo tiempo una industria con una buena salud financiera que permita las inversiones necesarias".
Fragmentación del tráfico europeo
No obstante, la situación real en la actualidad es bien distinta. "La fragmentación del tráfico aéreo europeo es una muestra de ineficiencia que se traduce en emisiones de combustible, costes innecesarios, gastos para los usuarios y retrasos excesivos", apunta Hartman. De ahí que sea "inconcebible que la directiva ETS castigue a las aerolíneas por emisiones de CO2, cuando se las obliga a volar en un espacio fragmentado", señala Hartman. En este sentido, la asociación considera que un sistema de comercio de emisiones punitivo se convertiría en "una medida contraproducente".
Por todo ello, la asociación "rechaza" cualquier tipo de modificación sobre los parámetros del sistema general de comercio de emisiones dirigido a la industria de la aviación antes de que el ‘cielo único europeo’ sea efectivo. Así se expresó durante la reunión de su Asamblea y en la que estuvo presente el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario europeo de Transportes, Antonio Tajani.










