Los 27 han acordado la inclusión de la aviación civil dentro del sistema comunitario de emisiones de dióxido de carbono, "fomentando así la lucha contra el cambio climático", expresa el secretario general para la Prevención de la Contaminación y la Lucha contra el Cambio Climático, Arturo Gonzalo Aizpiri. Esta nueva normativa, que podría entrar en vigor a partir de 2012, significará la fijación de un tope en los permisos de contaminación de CO2 de las compañías aéreas basado en el promedio de emisiones entre 2004 y 2006. Además, esta iniciativa otorgará la posibilidad de comprar los derechos suplementarios a otras industrias en el caso de que se supere la emisión establecida.
Esta normativa promovida por los ministros de Medio Ambiente de la UE, que está a la espera de ser aprobada por la Eurocámara, afectará a todos aquellos vuelos que aterricen o despeguen en alguno de los aeropuertos de la Unión Europea. Además, la mayoría de los permisos de emisión se distribuirán entre las aerolíneas de manera gratuita, aunque un 10% del total será subastado.
Gonzalo Aizpira ha querido acabar con la controversia levantada en el Sector Turístico español afirmando que "el 90% de los vuelos a las regiones ultraperiféricas, como el caso de las Canarias, estarán excluidos del ámbito de aplicación de esta norma", ya que han sido definidos como obligaciones de servicio público.
Cumplimiento con las reducciones del Protocolo de Kioto
Con esta propuesta la Comisión Europea espera lograr una reducción de 183 millones de toneladas de CO2 para el 2020, lo que representaría una disminución del 46%. En la actualidad, las emisiones de dióxido de carbono del sector de la aviación representan el 3% del total y el 12% del transporte en general. Aunque estos porcentajes no son muy significativos, adquieren importancia debido al constante crecimiento que está experimentando este medio de transporte. Según las previsiones de la Unión Europea, para el año 2012 este segmento crecerá un 150%, por lo que si no se toma alguna medida será imposible la reducción del 8% de la emisión de gases fijada en el Protocolo de Kioto.
Por otro lado, la Comisión Europea también ha aprobado una propuesta que incluye que todos vehículos de la flota pública sean "limpios y reduzcan sustancialmente" sus emisiones de CO2 a la atmósfera. Está medida será opcional hasta el año 2012, en la que adquirirá un carácter de obligatoriedad para todos los países miembros. En este sentido, el comisario de Transportes, Jaques Barrot, ha destacado que " el creciente esfuerzo de las autoridades públicas para hacer más limpios y eficientes sus vehículos necesita el respaldo a nivel europeo".









