En 2008 las aerolíneas podrían empezar a "imputar o transferir los costes de las comisiones y tasas por uso que les cargan las compañías de tarjetas", afirman los observadores para quienes la mayoría de viajeros corporativos no reservan sus billetes aéreos a través de la web, sino que utilizan los servicios de las agencias de viajes de su compañía (TMC) que, como BCD Travel, generalmente hace sus reservas a través de GDS. Es en este punto, subrayan, donde las aerolíneas están considerando cargar a las agencias de viajes los costes en que incurren por pagar estas transacciones.
Por su parte, Stratford piensa que "las comisiones y tasas de las tarjetas de crédito están en la línea de fuego porque representan el próximo blanco lógico en la guerra de precios. Ha sido una labor dura, pero las aerolíneas han hecho un buen trabajo en lo que al ahorro de costes se refiere". Igualmente agrega que "por su volatilidad, el coste del petróleo no puede ser controlado, así que las aerolíneas se están focalizando en aquello que pueden reducir, es decir, en los costes de distribución".
A pesar del descontento de las compañías aéreas con esta situación, aún no tienen claro como resolver el problema, agregan los analistas. Igualmente piensan que "algunas, especialmente las aerolíneas de ‘bajo coste’, han comenzado a cobrar cargos de gestión por pagos con tarjeta de crédito a través de sus páginas web".
Como en el caso de los costes adicionales que los GDS introdujeron en Estados Unidos en 2006 y en Reino Unido en 2007, "los TMC tendrán inevitablemente que transferir estos costes a sus clientes corporativos", afirman los observadores, a lo que Stratford señala que “si las aerolíneas transfieren los costes generados por los pagos con las tarjetas de crédito, finalmente causarán un incremento en los costes para el consumidor”.
Algunas recomendaciones de los analistas
Una opción para las aerolíneas, recomiendan, "es promover otras alternativas de pago, por ejemplo Southwest Airlines, Northwest Airlines y muchas otras compañías aéreas pequeñas han introducido el sistema electrónico ‘PayPal’ que cobra tasas mucho más bajas que las compañías de tarjetas". La desventaja, agregan, es que este sistema solamente funciona para las reservas hechas a través de páginas web, pero no cubre las reservas realizadas a través de los GDS más utilizados en la gestión de viajes corporativos. Al respecto, Stratford señala que "las empresas consolidan sus pagos y su información de gestión a través de una tarjeta corporativa y utilizar diferentes métodos de pago, fragmentaría sus programas”.
Otra recomendación de los observadores es seleccionar un proveedor de tarjetas con tasas más bajas. "Por ejemplo, las tarjetas basadas en la red de pagos de Universal Air Travel Plan, ya que sus tarifas son mucho más bajas sencillamente porque la propia red pertenece a las aerolíneas".








