Aguilar ha puntualizado que el gabinete jurídico de la firma del arquitecto ha requerido al Ayuntamiento una serie de "garantías" que el Consistorio, "como Administración pública", no puede ofrecer conforme a la ley. En este sentido aclaró que de ahí que el Ayuntamiento haya decidido que si finalmente Foster opta por abandonar el proyecto, existen otros arquitectos que podrían diseñar el recinto, aunque descartó que existan "problemas" con el estudio de Foster.
El Ayuntamiento de Almería inició en 2006 las conversaciones para que el arquitecto británico desarrollara el proyecto que recibirá una subvención superior a los ocho millones de euros por parte de la Junta de Andalucía. A falta de un acuerdo definitivo, en 2009 empezarían las obras de un recinto que tendría capacidad para unas 2.500 personas, un diseño vanguardista y que pretende ser un reclamo para la celebración de congresos en la ciudad.








