El logotipo pretende transmitir la profundidad de la entrada principal y, según la propuesta, "nos recuerda el elemento diferenciador al imitar el acceso al recinto amurallado a través de la rampa que conduce al portal de las tablas". La fuente utilizada juega un papel "crucial" identificando la arquitectura del edificio con una forma simple y directa. Todas las características integradas en un diseño lineal donde se reflejan la horizontalidad y geometría del edificio.
El jurado del concurso estaba compuesto por la consejera de Promoción Turística, Pepa Marí, el pintor Antonio Villanueva, el diseñador gráfico, Juan José Ribas, y en representación del Ayuntamiento, Carmen Boix.








