Durante las vacaciones del puente de mayo, la "prudencia" define el comportamiento de la oferta por parte de agencias y turoperadores, en cuanto que han intentado ajustarse a las previsiones de demanda, según los principales actores del Sector. En resumen, se puede hablar de "unos resultados razonablemente buenos", a juicio del presidente de AEDAVE, José Manuel Maciñeiras. De modo que, a pesar de la desaceleración que acusa la economía internacional, turoperadores y agencias de viajes han sabido "salvar" los cuatro días de vacaciones que ha brindado el puente de mayo —favorecidos en algunas Comunidades como Madrid, donde el día 2 también ha sido festivo—.
No obstante, se trata de una verdad a medias, ya que las mayoristas han optado por reducir la oferta turística para estos días y bajar los precios, como ocurrió durante la Semana Santa. En parte, motivadas por las previsiones de antes de las vacaciones —desaceleración económica y aumento del precio del combustible, entre otros factores decisivos— que hacían presagiar un menor número de desplazamientos. En este sentido, la prudencia ha permitido una mayor optimización en cuanto a la gestión del precio para los intermediarios, "ya que ha existido un menor riesgo por plazas no ocupadas", sostiene Maciñeiras. Sin embargo, la prudencia de agencias y mayoristas podría catalogarse incluso de excesiva, puesto que sorprendentemente, al final "la oferta ha sido inferior a la propia demanda", afirma el presidente de FEAAV, Jesús Martínez Millán.
No obstante, la reducción de la oferta y la caída de los precios puede motivar, una vez realizadas las cuentas de resultados, "caídas en la rentabilidad para las agencias", a juicio del presidente del Grupo Airmet, Juan José Oliván. En esta misma línea de pesimismo, el puente de mayo ha estado protagonizado también por el aumento del precio combustible. Si bien éste "no se ha trasladado al precio final para el cliente, sí que ha provocado una reducción de los márgenes económicos para los distribuidores", señala el presidente de la Asociación Española de Compañías Aéreas (AECA), Felipe Navío.
Turismo como primera necesidad
En base a los datos aportados por los expertos del Sector y al propio comportamiento del mismo, se puede decir que el Turismo se ha convertido en un producto de primera necesidad. "La gente tiene la necesidad de viajar", señala Martínez Millán. Si bien la diferencia con años atrás "radica en el modo en que se realizan los viajes". Así, el comportamiento de la demanda ha sido diferente, en cuanto que se ha producido un mayor ajuste económico, posiblemente materializado "en un menor gasto en el destino", a juicio de Martínez Millán.
Asimismo, la mayoría de desplazamientos se ha realizado en vehículos propios, primando el "Turismo doméstico", informa Maciñeiras. En este sentido, el territorio nacional ha sido el principal destino para los españoles durante las vacaciones de primeros de mayo, a diferencia de "épocas de bonanza económica, cuando se prefieren otras zonas más lejanas", concluye el presidente de AEDAVE.









