La superficie del complejo turístico será de 81 hectáreas —unos 80 campos de fútbol— y en su diseño y construcción se están respetando "minuciosamente" el entono natural y se están empleando "exclusivamente" materiales ecológicos. Además, Zmar ha explicado que en la construcción del camping están participando 80 operarios especializados en sostenibilidad.
En este sentido, todos los edificios comunes —restaurante, guardería infantil, spa y cabañas— se han construdido con "madera procedente de bosques certificados" y todas las carreteras, vías de circulación, aparcamientos y parques de caravanas "están sin impermeabilizar", con lo que se evitan así, según la compañía, los materiales "difícilmente degradables".
Aprovechamiento de los recursos naturales
De la misma forma, la gran altura de los techos de las zonas comunes, las dobles paredes y los pasillos orientados según los vientos dominantes, aseguran, de acuerdo a los constructores, "temperaturas agradables en cualquier época del año" sin acudir a "aire acondicionado o calefacción".
Además, en las cubiertas de los edificios se han colocado placas solares, que proporcionan energía eléctrica a buena parte de las instalaciones, y calientan el agua necesario para un camping cuya capacidad será de más de 3.000 personas.









