A medida que se acerca la primera gran cita para el Sector como es la Semana Santa, los empresarios canarios respiran un poco más aliviados porque, por ahora, los resultados de 2009 "están siendo mejores de lo que esperábamos", según Fraile, quien ha manifestado que, viendo cómo han ido evolucionando otros sectores de la economía, "pensábamos que la Hotelería iba a entrar en caída libre mucho antes".
"Sin embargo", ha añadido, "las cifras del mes de enero han registrado descensos que no son espectaculares, son malos, pero no tanto".
En este sentido, el representante de la asociación canaria se ha referido también a las previsiones de cara al verano hechas a partir de las estimaciones de los asociados "más pesimistas", que contemplaban caídas de hasta el 40% en la ocupación, un dato que, tal y como ha apuntado, "se va reducir bastante".
De cara a la temporada alta, Fraile ha señalado que el problema es que habrá establecimientos hoteleros y extrahoteleros que estarán "prácticamente llenos", mientras que otros "tendrán que cerrar por falta de clientes".
Además, ha puntualizado que hay complejos que en verano "no van a abrir", con lo cual se va a entrar en "una situación que no se había producido en Canarias desde hacía muchísimos años" que es la estacionalidad: "abrir en verano y cerrar en invierno".
Estacionalidad y cierres
Al respecto, el presidente de la FEHT ha concretado que la estacionalidad del destino "podría comenzar en Semana Santa y terminar en agosto" y, sobre el número de establecimientos que se verían abocados al cierre, ha manifestado que "es difícil dar un dato exacto" aunque los más susceptibles serán "los que dependan durante el verano del mercado británico".
Así, Fraile ha explicado que muchas veces se trata de complejos que se nutren en invierno de la llegada de turistas de los países escandinavos que dejan de llegar "normalmente en Semana Santa" cuando comienza el flujo de visitantes de Gran Bretaña y la Península.








