Desde que se publicara el informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en el número de marzo de su revista OCU-Compra Maestra, en el que tachaba de "fraudulentos" todos los catálogos revisados por dicha organización, las Asociaciones de agencias de viajes han discutido sobre el asunto para tomar medidas al respecto. Es por ello, que la Mesa del Turismo ha remitido un escrito en el que aconseja a estas Asociaciones que interpongan demandas judiciales ante "la ignorante y gravemente injuriosa nota".
Desde la Mesa del Turismo se ha hecho esta recomendación a las Asociaciones por creer que los resultados que muestra el informe "es una acusación de gran gravedad e implica un delito". Como explica su presidente, Juan Andrés Melián, "es una ligereza el generalizar", por lo que "no es correcto lo que la OCU ha expuesto públicamente". Además, "nuestro Sector se encuentra bajo la tutela y el control de innumerables disposiciones de uso obligado", por lo que "la denuncia de la OCU se ha realizado de manera indiscriminada", apunta Melián. Hay que recordar, según explican desde la Mesa, que el Sector de agencias es uno de los más duramente reglamentados y se les exige tanto a ellas como a los turoperadores unas elevadísimas fianzas y seguros de responsabilidad civil para responder de cualquier deficiencia o fallo de actuación.
Una apuesta por el diálogo
El pasado 12 de marzo, se reunía la Mesa del Turismo para tratar, entre otros asuntos, el informe de la OCU. Concretamente, en este encuentro, el presidente de AEDAVE, José Manuel Maciñeiras, expuso la posibilidad de discutir las medidas a tomar, por parte del Sector, con respecto a la nota de la organización. En este sentido, Maciñeiras explica que "desde AEDAVE estamos estudiando la posibilidad de interponer acciones legales y tenemos todo en manos de nuestros abogados". De cualquier manera, el presidente de la Asociación indica que "ante todo apostamos por el diálogo", por lo que "se hará un escrito argumentativo a la OCU para que emita una nota de rectificación sobre su informe". En caso de que la organización no tome en cuenta esta posibilidad, "se emprenderán las acciones legales más adecuadas para este asunto", añade Maciñeiras.
Por su parte, el presidente de FEAAV, Rafael Gallego, que se reunía la semana pasada con sus asociados para discutir la posibilidad de mantener un diálogo con la OCU antes que nada, apunta que, en primer lugar, "queremos conocer debidamente este informe y no guiarnos por los titulares de prensa". De esta forma, Gallego, señala que "todo el mundo habla de él, pero hay un cierto desconocimiento sobre el mismo y hay que averiguar fehacientemente lo que expone".










