Durante los próximos seis meses, el ITA contabilizará y analizará el consumo en los lavabos, duchas, bidés y cisternas de cada una de las habitaciones del recientemente reformado NH Center de Valencia "sin repercutir negativamente en el confort de los huéspedes", tal y como ha explicado la cadena.
Cada gasto de agua se registrará en tiempo real en un programa informático desarrollado por el ITA, que permite dibujar lo que el instituto define como "la huella dactilar del consumo hídrico". Es decir, permite discriminar el origen de cada uno de los consumos y concretar cuánta agua se gasta, a qué horas y con qué frecuencia.
Este seguimiento tiene un doble sentido; por un lado, analizar la eficacia de los perlizadores, ahorradores de agua y sistemas de doble descarga en cisterna instalados en las habitaciones y por otro constatar si los cursos de sensibilización ambiental que NH imparte a sus empleados son efectivos en la práctica diaria.
En este sentido, NH ha insistido en que esta actuación servirá "no sólo para describir las pautas de consumo de agua, sino para hacer seguimiento de sus políticas de sensibilización de empleados y para profundizar en los posibles puntos débiles de sus programas de formación medioambiental relacionados con el consumo de agua".










