"El cambio climático es un problema global" explica el director general de IATA, Giovanni Bisignani. "La aviación es una industria global y necesitamos una filosofía global para este sector industrial si queremos luchar contra el cambio climático de forma efectiva", aclara. "Los mecanismos diseñados para quienes polucionan en tierra pueden no ser efectivos para la aviación", añade Bisignani.
"Los esquemas regionales y nacionales ya están creando solapamientos de impuestos para llenar las arcas de los estados, pero no hacen nada o muy poco para gestionar de forma efectiva las emisiones de la aviación", explica Bisignani. Por esta razón, el sector aéreo ha presentado un documento explicando el compromiso de la industria con tres objetivos secuenciales.
Por una parte, proponen mejorar la eficiencia respecto a las emisiones de carbono con una mejora media anual del 1,5% en eficiencia de consumo de combustible hasta 2020. Además, consideran que se podría lograr una estabilización de las emisiones con un crecimiento neutral en carbono a partir de 2020. Por último, la reducción de emisiones con un recorte del 50% absoluto en comparación con 2005 se alcanzaría en 2050.
"Nuestros objetivos son duros", señala el director general de IATA. "El transporte aéreo es la primera industria en comprometerse a un crecimiento neutral en carbono a nivel global y lo hemos hecho con un agresivo calendario hasta 2020", sostiene. "Nuestra estrategia de cuatro pilares de inversión en tecnología, infraestructuras eficientes, operaciones efectivas y medidas económicas positivas, hará realidad nuestra visión, y ya está mostrando resultados", concluye Bisignani.











