Disfrutalia es la apuesta de Lluís Llavina y Jesús Hernán por ofrecer un valor añadido en los viajes en una época de crisis en la que se hace necesario innovar para hacerse hueco en el mercado. Como explican desde la nueva compañía "la situación económica y el desarrollo del Sector Turístico han traído consigo la necesidad de añadir valor a cada momento del ocio y no es suficiente con conocer el destino sino lo que se va a hacer allí". Así, Disfrutalia propone ofrecer más allá de la oferta de transporte y alojamiento un "plus experiencial que genere un mayor impacto positivo en su vida y las convierta en un recuerdo memorable".
Como señala su cofundador y director general, Lluís Llavina, "Disfrutalia representa una actitud activa e inconformista ante el tiempo libre". "Tenemos mucho por hacer y mucho por aprender, pero estamos seguros de que entre todos, especialmente proveedores y consumidores, no sólo seremos capaces de dinamizar el sector del ocio, entretenimiento y Turismo, sino también de crear un impacto positivo real en la vida de todas las personas que compartan esta actitud vital", apunta.
Para el cofundador y director de Innovación, Jesús Hernán, "buscamos dar una alternativa emocional y memorable a las propuestas de ocio, entretenimiento y Turismo que suelen encontrarse hoy en día". "Nuestro objetivo es garantizar que vivan experiencias únicas, genuinas y memorables: experiencias Disfrutalia", subraya.
El proyecto, que cuenta con el asesoramiento directo de Josep-Francesc Valls, está formado por un equipo "joven y ambicioso", comentan sus cofundadores. Además, posee el apoyo de inversores privados con experiencia en el sector entre como Anca Hoteles S.L, vehículo de inversión patrimonial de la familia Catalán.
Buscador racional o emocional
Desde inicios del próximo mes de noviembre, Disfrutalia comercializará sus experiencias a través de su ‘portal’ www.disfrutalia.com. A medio o largo plazo, prevé expandirse a los dispositivos móviles con aplicaciones específicas y a otros ámbitos mediante alianzas estratégicas. La compañía, como detallan sus cofundadores, nace con el objetivo de ofrecer experiencias sensoriales. Para ello, en un primer paso identifica a personas y empresas "que cuentan con la capacidad de ofrecer una experiencia única". A partir de ahí, crea productos singulares "que impacten al individuo, con un fuerte componente emocional, para promocionarlos y ponerlos al alcance de cualquier persona que quiera regalar y compartir una experiencia con su ser querido", explican desde la compañía.
Las experiencias de Disfrutalia se encuentran categorizadas en su web por dos tipos de etiquetas: racional y emocional. De esta forma, el usuario puede encontrar, por ejemplo, la experiencia ‘Conduce la historia de Ferrari’ por conceptos racionales como coche, conducir o adrenalina, o por conceptos emocionales como euforia, sofisticación o pasión. Entre los productos ofertados se podrá encontrar desde la experiencia ya comentada de conducir un Ferrari, saltar en paracaídas o experimentar un masaje en un "tratamiento ayurvédico exclusivo llevado a cabo por uno de los cinco mayores especialistas de dicha técnica en un spa urbano tailandés".









