De este modo, el edificio donostiarra se sumó, como ya lo hiciera en noviembre de 2007 y en marzo de 2009, a la convocatoria internacional que propone la fundación WWF como vía para llamar la atención sobre el calentamiento global.
Desde el Kursaal destacaron que con esta acción, además del ahorro de consumo que se registrará, se persigue el objetivo de que "los distintos gobiernos y empresas de todo el mundo, así como los ciudadanos, se involucren en el mantenimiento del medio ambiente".











