Acotur ha mostrado en un comunicado su "malestar, indignación e impotencia" ante los peligros que puede conllevar la extensión "incontrolada y no regulada" de este tipo de oferta por los hoteles de las islas.
La patronal ha informado de que el pasado día 6 de julio manifestó a la titular de la Consejería de Turismo y Trabajo, Joana Barceló, su "gran preocupación" ante este "gravísimo nuevo producto importado del Caribe", destino turístico que, en su opinión, "nada tiene que ver con el Mediterráneo, donde no existe oferta complementaria, no existe seguridad y carecen de infraestructuras básicas".
No obstante, ha puntualizado que "los hoteles del Caribe son y tienen las infraestructuras apropiadas y adaptadas para dicho régimen especial".
Así, la asociación ha señalado que va a seguir "solicitando, mediando, trabajando y luchando para evitar que los touroperadores sigan aprovechándose de este producto con motivo de la actual coyuntura económica de recesión". Con este fin, va a tratar de evitar que "sigan vendiendo a la baja, y, por tanto, se beneficien de hoteleros en situación crítica, degradando el turismo balear como destino".









