La web ofrecía viajes a Tailandia por 1.600 euros, con el vuelo incluido, o por 700 euros si el cliente se encargaba de buscarlo. La estafa ha provocado 200 denuncias por un total de 150.000 euros. Antes de realizar el viaje, los afectados pagaban una determinada cantidad por la reserva del mismo, y la supuesta empresa se comprometía a facilitar la información del recorrido y los localizadores durante los días posteriores, información que, finalmente, nunca llegaba, siendo imposible también contactar con el teléfono indicado.
La Policía calcula que podría haber unas 1.000 víctimas en todo el Estado, procedentes de diferentes poblaciones de Cataluña (Sabadell, El Prat, Tortosa y Barcelona) y del País Vasco, Valencia, Almería, Madrid, Sagunto, Mérida, Tenerife, Sevilla, Móstoles, Alicante y Cádiz. FEAAV ha denunciado que hay una "serie de intermediadores turísticos", fundamentalmente aquellos que se dedican a la venta online sin cumplir la normativa existente que terminan derivando en hechos fraudulentos.
La Federación ha recordado que el cumplimiento de las normas por parte de las agencias de viajes implica la adecuación a la legislación vigente a través de las correspondientes pólizas de responsabilidad civil y del establecimiento de avales frente a la Administración. "Este tipo de estafas son una demostración más de la diferencia de gestión, seguridad y confianza entre las agencias de viajes tradicionales y los nuevos intermediarios turísticos, especialmente online, que pueden acabar perjudicando seriamente los intereses de los clientes", concluye FEAAV en un comunicado.










