El 2011 será, previsiblemente, otro año perdido. Y no sólo para la reactivación del consumo de viajes y vacaciones, sino para la recuperación del margen. La rentabilidad del Sector, sumamente afectada por la guerra de precios y descuentos, continuará siendo este año una asignatura pendiente para los agentes. Pese a que el consumo de viajes ha demostrado su fortaleza relativa frente a otras demandas maduras, como el automóvil, la propensión al ahorro de las familias y empresas impide el despegue del mercado emisor doméstico.


