Los resultados preliminares muestran que de los 656 millones de turistas internacionales que visitaron los países del G20 en 2011, 110 millones necesitaron visado, mientras que otros muchos millones desistieron de viajar debido al costo, al tiempo de espera y a la dificultad de obtener un visado. Según el estudio, a pesar de los pasos que se han dado en las últimas décadas para facilitar los desplazamientos, "todavía hay muchas oportunidades abiertas, concretamente la posibilidad de aprovechar al máximo las tecnologías de la información y de la comunicación para mejorar los procedimientos de emisión de visados".
Asimismo, el documento resalta que también ofrecen oportunidades las mejoras en el suministro de información, la simplificación de los actuales procedimientos para obtener un visado, el trato diferenciado para facilitar los viajes turísticos, la creación de programas eVisa y la firma de acuerdos regionales en la materia. "Aplicar una o varias de estas medidas puede arrojar sustanciales beneficios en términos de visitas, ingresos por Turismo y puestos de trabajo para las economías del G20", concluye.
Por todo ello, la OMT elogia la decisión del G20 de promover la agilización de los visados. Así, en la Declaración de la reunión de ministros de Turismos se resalta que "para garantizar que el Turismo pueda desempeñar un papel clave en la creación de empleo y en el estímulo del crecimiento económico, es preciso que la facilitación de los viajes y el Turismo se convierta en una prioridad".











