El directivo detalla que "básicamente perseguimos tres grandes objetivos: ser expertos en protección del consumidor y servicio al cliente, ser pioneros en protección climática y fomentar y fortalecer la cohesión en airberlin y en nuestra sociedad". Para conseguirlo, la compañía aérea ha diseñado su programa de eficiencia de combustible, que se compone de 44 medidas, que abarcan aspectos como los momentos previos al despegue, la planificación de vuelos, la reducción del peso y la modernización del avión.
airberlin también ha puesto en marcha este verano unos cursos denominados ‘Fuel Efficiency Training’ para enseñar a sus pilotos cómo ahorrar queroseno. No obstante, la compañía aérea aclara que en ningún caso se trata de "repostar menos combustible, sino de consumir menos cantidad". Otra de las iniciativas de la aerolínea es el uso de winglets (puntas del ala que se elevan hacia arriba y reducen los remolinos de aire) y el cálculo de la altura de vuelo óptimo para cada trayecto.









