Los problemas de salud y los accidentes a bordo suponen el 33% de las reclamaciones. La mayoría se deben a quemaduras en cubierta, mareos, trastornos por cambios bruscos de temperatura, gastroenteritis, lumbalgias y dolores musculares. Los accidentes más comunes son caídas y resbalones que provocan fracturas y esguinces.
Todos los barcos cuentan con un centro médico o una enfermería de guardia permanente, pero esta atención no es gratuita. El coste suele ser de 50 euros si la consulta se realiza en horario normal de apertura, 65 euros si se produce fuera de este horario y de 90 euros si la consulta es por la noche. A estos gastos hay que sumar los precios de las medicinas. Además, los gastos médicos se elevan considerablemente si el enfermo necesita un desembarco para acudir a un hospital en tierra y, sobre todo, si fuera necesaria una repatriación, en cuyo caso el coste puede superar los 12.000 euros.
Por otro lado, el estudio de InterMundial concluye que aunque la antelación en la reserva garantiza el acceso a mejores tarifas, también aumenta las posibilidades de que algún imprevisto obligue a cancelar el viaje. Un 10% de las personas que contratan un crucero lo cancelan, teniendo que afrontar gastos de gestión, anulación y penalizaciones en el caso de no haber contratado ningún tipo de seguro de viaje específico para estas situaciones, lo que puede suponer entre un 30% y un 100% del coste del mismo.











