Ya ha entrado en vigor el plan PIMA SOL, dirigido a la reducción de emisiones de CO2 en los hoteles. Se espera que dichas reducciones se logren en porcentajes de entre 40 y 70%, ya que uno de los requisitos es que la renovación suponga al menos una mejora en dos letras en su calificación energética o que se alcance la letra B como mínimo. Pero las previsiones positivas no terminan ahí. Según cálculos oficiales, el plan -aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 2 de agosto a propuesta del Ministerio de Agricultura- creará cerca de 8.000 puestos de trabajo. Previsiones, sí, pero de las buenas.


