Es el caso de Can Lluc Boutique Country Hotel & Villas, un establecimiento pionero en Ibiza y Formentera en cuanto al cuidado del entorno y el medio ambiente. No es casual que uno de los principales atractivos de Can Lluc, además de su estética basada en el respeto por la construcción típica ibicenca, sea el entorno vegetal que rodea a este enclave situado en pleno el centro de la isla. En ese mismo entorno, sus villas, construidas con las últimas tendencias del diseño, pero sin renunciar a la tradición, ofrecen la posibilidad de vivir una estancia de privacidad y detalles con sus más de 2.000 parras y rodeado de pinos, higueras, algarrobos y olivos milenarios.
Can Lluc es un establecimiento pionero en Ibiza y Formentera en cuanto al cuidado del entorno y el medio ambiente
Can Lluc tiene la certificación medioambiental internacional ISO 14001 de Aenor, que acredita que el hotel cuenta con una estricta política de calidad y medio ambiente. De hecho, Can Lluc se somete a periódicas auditorias cuyos resultados avalan el buen hacer que el agroturismo lleva a cabo. Además, el establecimiento se ha adherido al Sistema Integral de Calidad en Destino, SICTED, que gestiona la Consejería de Turismo del Govern Balear. Estos certificados se traducen en pequeñas acciones que, sumadas, revierten en numerosos beneficios para el entorno, como es el caso de la instalación de placas solares para agua caliente sanitaria, que redunda en una importante reducción del consumo eléctrico de todo el hotel. Además, uno de los atractivos de Can Lluc es su piscina, calificada como una de las 10 mejores del mundo por el portal Rusticae, que cuenta con un sistema de filtrado del agua basado en la electrólisis salina, que sustituye al cloro sintético por elementos naturales como agua y sal. Para ello, el hotel se aprovisiona de sal procedente de las salinas de Ibiza.
La simbiosis de Can Lluc con la naturaleza permite recorrer la Ibiza más natural a pie, en moto o en bicicleta. Y es que, para cuidar al máximo el entorno que rodea el agroturismo, Can Lluc ha instalado en su terreno, en colaboración con el Ibanat y la Associació de Propietaris Forestals d’Eivissa (APFDE), uno de los 20 depósitos de agua contra incendios que se ubican en diferentes fincas repartidas por toda la isla. El objetivo es que los efectivos de emergencia, tanto aéreos como terrestres, dispongan de agua de forma inmediata en caso de incendio forestal.